¿Cuándo el estrés se puede volver perjudicial?

terapia estres

¿Quién no ha sufrido estrés en algún momento de su vida? 

La respuesta sería nadie ya que el estrés es un proceso natural, una respuesta automática que hace nuestro cuerpo. En el artículo de hoy quiero hablarte sobre esto, si te interesa este tema y quieres aprender un poquito más sobre el estrés, quédate y sigue leyendo. 

Como te contaba antes, el estrés es un proceso natural de nuestro cuerpo, cuando percibimos una amenaza, un peligro o una situación desafiante, nuestro cuerpo reacciona de forma automática para movilizar todo nuestro organismo y ayudarnos a protegernos y a hacer frente a estas situaciones. 

La palabra “estrés” proviene del latín Stringere que significa “apretar”. En muchas ocasiones, el estrés nos aprieta, nos genera esa sensación de ahogo por no llegar a todo lo que nos proponemos y es que, en muchas ocasiones, el estrés perturba nuestro equilibrio mental y emocional.  

Ahora bien, ¿Cuándo el estrés puede ser perjudicial? 

No todo el estrés es perjudicial. En ocasiones, un poco de estrés viene bien porque da el empuje y la energía que se necesitan para sobrellevar ciertas situaciones, como rendir un examen, ayudarnos a que un día podamos atender a más de un asunto que atender, cumplir con algún plazo ajustado de entrega de un trabajo…

El estrés, cuando se convierte en un problema es cuando se sostiene en el tiempo. Un estrés mantenido en el tiempo nos genera una serie de consecuencias muy graves para nuestra salud. El estrés es uno de los factores que está presente en 3 de las enfermedades con más causa de mortalidad que son el Cáncer, los problemas cardiovasculares y los cerebrovasculares. 

Un estrés mantenido también nos inflama, es por ello por lo que, en nuestro servicio de nutrición y psico nutrición, cada vez vemos más patologías digestivas e intestinales. 

Cuando percibimos un peligro, en nuestro cerebro se inicia un proceso químico que hace que se segrege adrenalina, noradrenalina y cortisol, las hormonas del estrés. Estas hormonas son las que nos ayudan a movilizar nuestro cuerpo y nos hacen ponernos en marcha.  ¿Qué ocurre cuando el estado de estrés se prolonga, por ejemplo, más de ocho semanas?  Que la cantidad de hormonas del estrés hacen que se disminuyan los niveles de hormonas como la serotonina, la dopamina y la oxitocina (que son las hormonas del bienestar). 

Podemos tener síntomatomas como: 

  • Fatiga constante y falta de energía.
  • Dolores de cabeza
  • Problemas digestivos, trastornos gastrointestinales, dolor abdominal, aumento de gases, diarrea, estreñimiento. 
  • Tensión y dolor muscular. 
  • Dificultades para conciliar el sueño o insomnio. 
  • Aumento o disminución en el apetito. 
  • Ansiedad o preocupación excesiva. 
  • Irritabilidad, cambio de humor repentino. 
  • Sensación de impotencia, ahogo, desesperación. 
  • Falta de concentración. 
  • Sentimiento de tristeza y decepción. 
  • Aumento de la sensibilidad. 
  • Falta de memoria. 
  • Pensamientos negativos persistentes. 
  • Falta de claridad mental y toma de decisiones apresuradas. 
  • Aislamiento social 
  • Disminución de actividades sociales o hobbies. 
  • Aumento del consumo de sustancias como alcohol, tabaco…
  • Compras compulsivas. 
  • Procrastinación constante y dificultades en el rendimiento laboral o académico. 

¿Has reconocido alguno de esos síntomas? Si te has sentido identificado/a, en nuestro centro de terapia breve, podemos ayudarte. Hay veces que vivimos tan en piloto automático que podemos no reconocer o identificar una situación de estrés, hasta que nuestro cuerpo no nos frena. Podemos acostumbrarnos a vivir en un estado continuo de estrés y llegar a normalizar esta sintomatología como parte de algo “normal”. 

Hace unos días, una persona que vino a consultar con nuestro servicio de psiconutrición, nos contaba que no había acudido antes a un especialista porque se había habituado a que, cada vez que comía, se inflamaba y tenía gases. Lo había normalizado, hasta que una compañera suya de trabajo, le sugirió hablar con un especialista. Tras las pruebas realizadas con su seguro médico, se dispuso a acudir a nuestro centro debido a que su médico de cabecera le había recomendado comenzar con un servicio de psico nutrición para tratar la úlcera gástrica que le había ocasionado una situación crónica de estrés laboral. 

Cuando la vida se complica, nuestra medicina natural es cuidar de nosotros y buscar aquellas cosas que nos permitan regular nuestras emociones. Una pierna rota se ve y no nos sentimos mal por ello, pero la salud mental es algo que no se ve. Estás roto por dentro y nadie lo sabe. 

¿Cómo podemos ayudarte a gestionar de una forma saludable el estrés?

En nuestro Centro de Terapia Breve Madrid, utilizamos el modelo de Terapia Breve Estratégica como herramienta para abordar el estrés. 

La terapia breve estratégica es un enfoque terapéutico basado en la idea de que los problemas y los síntomas pueden ser abordados de manera rápida y efectiva a través de intervenciones estratégicas y soluciones orientadas al cambio.  A través de esta metodología, desarrollarás habilidades de afrontamiento que estarán diseñadas para tu caso. Esto te permitirá mejorar tus relaciones personales con los demás ya que te ayudará a mejorar tus habilidades de comunicación y resolución de conflictos y podrás reducir el estrés y mejorar tu estado de bienestar en general. 

En resumen, el estrés crónico puede tener efectos perjudiciales en nuestra salud y bienestar. Sin embargo, la terapia breve estratégica ofrece herramientas efectivas para abordar el estrés y desarrollar habilidades de afrontamiento saludables.

 Si estás experimentando estrés y sus efectos negativos, considera buscar la ayuda de un terapeuta capacitado en terapia breve estratégica para obtener el apoyo necesario.

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Ana Belén Medialdea

Psicóloga general sanitaria en Madrid. Especialista en terapia con adolescentes, adultos y familias desde el enfoque de Terapia Breve y Estratégico.

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